TURISMO AL YASUNÍ
Por Guido Calderón
El Parque Nacional Yasuní comparte 56 km. de la frontera de 1.529 km. entre Ecuador y Perú, con apenas 5 ciudades: Huaquillas y Macará; Aguas Verdes, Zarumilla y Sullana en Perú. Aparte de ellas, no existe nada que separe físicamente a ambos países.
Nuestros asentamientos humanos en las estribaciones de la cordillera y en la infinita pampa amazónica, son insignificantes para crear “fronteras vivas”; por ello -desde hace décadas- los peruanos invaden y explotan los recursos del Yasuní, de las “zonas intangibles” y del resto de miles de km2 de selvas, donde talan, extraen oro y mantienen gigantescos sembríos ilegales que jamás serán detectados.
Perú es gran productor de cocaína después de Colombia, cuya frontera sur está a pocos kms. del Yasuní; hay que ser bien irresponsables para ocultar a todo un país, que los vecinos no explotan tierras ecuatorianas abandonadas, sin ninguna presencia física estatal.
Perú es país petróleo, la tierra que perdimos en el 41 fue por una compañía que, al negarle el gobierno de esa época la exclusividad de explotación, generó la guerra y Perú se quedó con grandes yacimientos petroleros, que colindan con el Yasuní.
Creer que unos escasos indígenas que no son ciudadanos del Ecuador, supuestamente no contactados, armados de lanzas de madera; impiden el ingreso de narcos armados con ametralladoras; requiere alto grado de simpleza.
En vez de prohibir la extracción de petróleo en el Yasuní, construyamos una carretera por toda la frontera con Perú y hagámonos cargo de todos nuestros recursos para explotarlos o protegerlos en territorio, no en papeles ni en consultas insensatas; además de crear nuevas ciudades planificadas donde vivan millones de ecuatorianos sin tierra.
Retirarnos del Yasuní, es una invitación a los narcos de Colombia y Perú, a que continúen su expansión cómodos y seguros. Es pedirle a Perú que no se tome la molestia de enviar tuberías subterráneas, sino que las extienda por suelo ecuatoriano y extraiga nuestro petróleo sin impedimentos, ya que todo un país ha renunciado a él./GC